Propuesta Educativa
Históricamente ha habido dos maneras de plantearse la dinamización del juego scout: un sistema de Programas y un sistema de Proyectos.
Cada uno de ellos tiene ventajas e inconvenientes.
El Sistema de Programas, centrado sobre todo en el progreso individual, propone el desarrollo de objetivos a largo plazo
sobre una línea de trabajo bastante predeterminada y concreta. Disminuye las posibilidades creativas tanto de la persona
que educa como de la persona que está educándose, si bien conduce más fácilmente a la consecución de los objetivos.
El Sistema de Proyectos, fundamentalmente orientado hacia el progreso comunitario, propone trabajar a través de actividades complejas
articuladas a partir de la secuencia reflexión-acción-reflexión, propuestas por la persona que se está educando y de duración más o menos definida,
sobre las que el educador o educadora tendrá que asegurar la presencia de objetivos educativos, en ocasiones difusos.
En línea con la mayor parte del Escultismo Católico en Europa, Scouts MSC opta en su Programa de Jóvenes por un sistema mixto,
en el cual coexisten itinerarios de progreso individual adaptados a cada persona con proyectos comunitarios muy abiertos a la
creatividad, que contribuyen a reforzar el desarrollo del progreso personal.
La Ley y la Promesa
La Ley Scout afirma un conjunto de valores universales que proponen una forma de vida,
una propuesta concreta, pedagógica, que realiza el Escultismo cuya aceptación es necesariamente
una libre opción personal. Este compromiso, público y solemne, es la Promesa Scout.
El contenido de la Ley y la Promesa es el mismo en todo el mundo y cada scout lo asume personalmente;
de esta forma la Ley y la Promesa constituyen la clave de la unidad ideológica del Movimiento Scout.
El Acompañamiento Adulto
Cada responsable acompaña y ayuda personalmente a cada uno de los niños, niñas y jóvenes a jugar al escultismo.
Su papel es, sobre todo, el de asegurar que los objetivos educativos del Movimiento están presentes para que cada scout
pueda progresar extrayendo sus propias conclusiones de las experiencias que vive.
Para ello, orienta, apoya y confía responsabilidades a los niños, niñas y jóvenes, asegurándose
de que tengan las condiciones adecuadas que necesitan y los medios para desarrollar las actividades que les interesan.
El Progreso Personal
El progreso personal en el Escultismo, que comienza con la incorporación al Movimiento,
es el camino recorrido por cada niño, niña y joven para alcanzar los objetivos personales
que se han propuesto dentro del marco de objetivos propios de cada Rama.
El marco simbólico
El marco simbólico es el lenguaje propio del Movimiento,
que permite a todos sus miembros desarrollar una comunicación propia adaptada a cada edad.
Este lenguaje da lugar a un sistema de identificación que cohesiona los grupos y refuerza
el sentimiento de pertenencia a través de la coherencia en el desarrollo del Programa de Jóvenes
y del Programa de Adultos.